Trabajadoras y trabajadores del Centro Juvenil Casa Ambiental de Castillos, en Rocha, se declararon en conflicto ante la resolución adoptada por las autoridades salientes del Instituto del Niño y el Adolescente del Uruguay (INAU) de rescindir el contrato que mantenían ambas instituciones para su gestión cotidiana.
“Esta decisión no tiene ningún fundamento jurídico ni funcional”, sostiene el colectivo de trabajadores y trabajadoras. Fue adoptada, agregan, “de manera arbitraria y sin llevar adelante los debidos procesos con las garantías correspondientes a la normativa vigente. En efecto, no se respetó ni ahora ni en circunstancias anteriores lo establecido en el Reglamento General de Convenios, que regula las relaciones entre las organizaciones contratadas y el INAU”. En este reglamento, señalan, se establece de qué manera se debe llevar adelante el monitoreo del cumplimiento de los proyectos.
Sostienen que “en todas las instancias en que fuimos monitoreados y supervisados por parte de personal jerárquico del INAU las evaluaciones que recibimos fueron satisfactorias”.
“Se afecta así directamente a la calidad de vida de 50 adolescentes de esta ciudad y cercanías a los que brindamos la atención especial que requieren, dada sus múltiples necesidades”, sostienen.
Acompañamiento en el centro
Indican que de lunes a viernes se realiza un acompañamiento socioeducativo que incluye talleres múltiples, acompañamiento personal y familiar, ya que nuestro trabajo se lleva adelante con los beneficiarios y sus familias.
“Conformamos un colectivo multidisciplinario de alta calificación y dedicación a las tareas, integrado por trabajador social, psicóloga, docentes y educadores que aportan a los adolescentes herramientas para su superación personal. Nos quedamos todos sin trabajo, en la calle y, lo más importante, se deja en completo desamparo a las y los 50 adolescentes”!, concluyen.